El uso de pequeños impresos, de las llamadas octavillas como modelos de publicidad para buscar proselitismo al ser hojas pequeñas que se pueden guardar, fue muy habitual en décadas anteriores, cuando se deseaba informar o bien explicar algo que debía ser conservado.
Este es el caso de la octavilla que os dejo aunque es algo más grande que una clásica octavilla. Y nos habla de religión, de Dios y la Muerte, incluso nos da una pista para salvarnos si comulgamos seguidos nueve primeros viernes de mes.
Es una hojita que en su artículo titulado "EL TEMOR Y LA CONFIANZA" reflexiona sobre la muerte y la vida. Utiliza la historia de la espada de Damocles para ilustrar la fragilidad de la existencia. Cita a Platón y a B. Constant para argumentar que la muerte puede ser vista como una liberación para aquellos que han dominado sus pasiones. Menciona a San Francisco de Borja (el Duque de Gandía) como ejemplo de alguien que encontró la verdadera dicha al meditar sobre la muerte y dedicarse a la vida religiosa, y finaliza como os decía, con una promesa del Divino Corazón, relacionada con la devoción de los Nueve Primeros Viernes de mes, que asegura la gracia de la perseverancia final.Esto os lo he simplificado para quien no desee leerse todo el texto, pues jopetas. No sé el año de impresión esta octavilla pero posiblemente tenga casi un siglo.
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